Este 2022 ha sido un año complejo para la economía ecuatoriana, la inflación -aunque menor que otros países de la región- ha afectado los precios de la canasta básica y las tasas de interés de los créditos se mantienen altas, situación que podría ser similar el próximo año 2023.
Ante este escenario, el abogado César Coronel, gerente general de Defensa Deudores Ecuador, entrega algunas recomendaciones para arrancar el nuevo año con una buena planificación financiera que evite caer en el sobreendeudamiento.
Elaborar un presupuesto mensual
Es fundamental que cada persona o grupo familiar realice un presupuesto en el que registre todos sus ingresos y gastos fijos para así tener un control de los recursos con los que dispondrá. Con ello podría, por ejemplo, anticipar el porcentaje de endeudamiento que pudiese tener durante el año.
Moderar los gastos hormiga
Gastos diarios en snacks, café, entre otros, son enemigos del bolsillo, ya que son egresos de los que no estamos conscientes por tenerlos muchas veces fuera del presupuesto. Lo recomendable es establecer límites claros sobre los gustos que nos podemos dar para enfocar nuestros gastos.
Evitar endeudarse
Siempre es mejor preferir el pago de contado, pero si no hay más alternativa que recurrir al endeudamiento, se debe ser prudente. “No hay que dejarse llevar por los descuentos, porque siempre existe el riesgo de adquirir una deuda difícil de pagar por los intereses que se pueden generar. Si va a usar una tarjeta de crédito, intente que la compra sea en la menor cantidad de cuotas posible y sin intereses para que no se vuelva una carga a futuro”, señala el abogado.
Intentar ahorrar
La pandemia nos enseñó que hay situaciones que no podemos prever y que muchas veces pueden causar problemas financieros graves. Por ello, es recomendable destinar un porcentaje de los ingresos al ahorro para crear un fondo que nos permita estar prevenidos ante cualquier eventualidad.
Con disciplina, planificación y compromiso se puede mejorar la salud financiera en el nuevo año. Comenzar con pequeños objetivos realistas ayudará a alcanzar metas más grandes, y así tener un 2023 sin sobreendeudamiento.